Un pelín de historia.

La más emblemática, para muchos entre los que me incluyo, consola de Sega cumple un cuarto de siglo. 25 años de grandes juegos que comenzaron a finales de la década de los 80 centrados en versionar muchos arcades punteros y que, durante los 90, acogió todo tipo de géneros subiendo la cota de calidad gracias a una de las rivalidades más fructíferas a las que hemos podido asistir.


Un 29 de Octubre de 1988 Sega busca dar un cambio de rumbo al mercado doméstico de videoconsolas hasta entonces dominado por la NES de 8 bits. En Japón la cuota de mercado de su Master System, pese a contar con un hardware algo superior y a ciertas conversiones de arcades muy conocidos, es ínfima. La máquina de Super Mario domina ese sector desde hace alrededor de un lustro sin apenas dejar nada para el resto. En 1987 NEC ya trató un golpe de efecto con su magnífica PC-Engine, que poco a poco se iba haciendo un hueco gracias a unas notables características técnicas entre las que destacaba su procesador gráfico de 16 bits MOS 6502 junto a su CPU de 8 bits. Alentada por este relativo éxito, aparece la primera consola de 16 bits: la Sega Mega Drive.

Por dentro.

Centrando su principal fuente de potencia en su procesador, el Motorola 68000 a 7,6 Mhz de velocidad, el salto de calidad estaba asegurado. De probada solvencia en ordenadores como el Amiga o el Sharp X68000 fue sin duda una apuesta inteligente su elección como corazón de esta nueva máquina. Además, para tareas secundarias se apoyaba en otro clásico como el Z80 de Zilog, alma de la Master System o del ZX Spectrum entre otros.

Sus características técnicas básicas son las que siguen:

  • CPU: Motorola 68000 a 7.67 Mhz
  • CPU secundaria (principalmente para sonido): Z80 a 3.58 Mhz
  • Resolución: 320x224
  • Colores: 64 en pantalla de una paleta de 512
  • Sprites simultáneos: 80
  • Chip Sonido: Yamaha YM2612
  • Canales de Sonido: 6 FM + 4 PSG 

Lucha y éxito.

Pese a todo lo que ofrecía, Sega no pudo ser profeta en su tierra con esta Mega Drive. El arraigo del pueblo japonés a Nintendo fue excesivamente fuerte y la máquina no dejó de ser un producto marginal por esos lares (vendió 3,5 millones de consolas por los más de 17 de la Super Nintendo). Afortunadamente Sega no se quedó de brazos cruzados y la situación en el resto del mundo fue bien distinta.

The Revenge of Shinobi

Estados Unidos y Europa fueron mercados muy propicios para que triunfase esta primera consola de 16 bits de la historia. 1989 fue el año en que desembarcó por tierras de América del Norte la Genesis (hubo que cambiar el nombre parece ser que por problemas de marcas registradas), quedando 1990 reservado para su aparición en el viejo continente. Acompañándose con títulos como 'Altered Beast', 'Ghouls'n Ghosts', 'Space Harrier 2' o 'Golden Axe', excelentes conversiones de arcades muy del gusto occidental, rápidamente llamó la atención de los asiduos a los recreativos deseosos por revivir esas experiencias en casa.   


Además del magnífico catálogo de juegos, que no paraba de crecer en calidad (Sonics, Shinobis, 'Out Run', 'Rocket Knight Adventures', 'Gunstar Heroes'...) otro bastión importante en el despegue y consolidación de ventas a gran escala fue crear una agresiva campaña de marketing y publicidad que no dejaba indiferente a nadie. Existen ejemplos de todo tipo pero en nuestro país, sin duda, los videos del "Canal Pirata Sega" fueron algo que todos los de aquella época recordamos y que, a más de uno y de dos, lograron venderle la máquina.



Mega Drive, todo un icono que acompañó (y acompaña) a una generación gracias a brindar maravillosos momentos con un pad en la mano.